Ya no puedo engañarme ;

Es cierto que si lo recuerdo, sonrío, vale. Pero no me voy a engañar, también me torna un nudo a la garganta, fue todo tan perfecto, y ahora... todo eso ha acabado. ¿Sabes? Extraño todo aquello, fue breve pero intenso, muy intenso. Recuerdo cada mensaje, cada detalle... Los leo y releo, y se me pone el rostro triste, sí. Tengo que aprender a reemplazar las malas caras por las buenas, a olvidar que el pasado fue mejor que el presente, y pensar que vendrá un futuro mejor que aquel pasado. Pero sé, y eso no me hace falta aprenderlo ya, que todo esto sería mucho más fácil a tu lado...