smiiiiiile.

Parece mentira el uso que le damos a algunas palabras sin pensar. Para algunas personas esa palabra lo es todo, significa un mundo. Para otras es sólo un divertimento. Lo mismo ocurre con los gestos, como un abrazo. Un abrazo de verdad es cuando estás en pleno invierno a tres grados bajo cero y esa persona te abraza, y sientes calor. ¡Es invierno y hace calor! Eso si es una muestra de cariño y no un vago intento de sobar a alguien. Hoy en día está de moda regalar besos, caricias, abrazos, halagos, lágrimas. Pero sobretodo hacerse la víctima. Te pueden ocurrir mil cosas malas, en serio, sólo mira los que están en Japón. Allí se necesita gente para limpiar la zona afectada por el escape nuclear y para observar que nadie pueda acercarse o que se produzca otro error. Esas personas ya están infectadas y van a morir por salvarnos. ¿Y tú crees que tienes problemas? Emplea tus palabras o gestos en algo que valga la pena, en ayudar a los demás pero no engañes. Y sobretodo no te auto-compadezcas. ¿Sabes cuál es el gesto que nunca hace daño y siempre hace feliz a la gente? Las sonrisas, nunca fallan, puede que no sean las solución a una catástrofe mundial, pero regalarlas es gratis y siempre hacen felices a la gente.