te doy a elegir

Te propongo un trato. Más bien te doy a elegir una vida entera solos tú y yo, sin nadie que nos moleste, ni nos diga lo que debemos o tenemos que hacer, que nosotros seamos los responsables de nuestro sueño y nuestra aventura, sin ataduras ni limitaciones. O prefieres un día, sólo uno el que tu quieras no importa el que sea. Tú solo tápate los ojos y ven junto a mi. Déjate caer suavemente en mi cama, deja sentir mi aliento recorriendo todo tu cuerpo, mi piel rozando la tuya, mientras que mis labios recorren tu cuerpo lentamente, déjame hacerte el amor hasta que la noche despierte y podamos caer rendidos toda la vida.